¿Necesito un extinguidor en casa?

Cuando se trata de seguridad contra incendios en el hogar, ser proactivo no es simplemente una opción: es una responsabilidad. Un incendio puede estallar en cualquier momento en tu santuario, convirtiendo la tranquilidad en caos en cuestión de segundos. En tales casos, un extintor de incendios doméstico actúa como protección inicial, minimizando el daño y potencialmente evitando una catástrofe en toda regla.



Para que se produzca un incendio, debe haber oxígeno, calor, combustible y una reacción química. En un típico incendio de vivienda, el combustible será la grasa o el aceite de cocina, o bien algún material combustible presente en la vivienda, tales como tela, papel o madera. Debido a la cantidad de combustible que en forma de madera o papel tiene una vivienda, es mejor tratar de detener el incendio cuando sea pequeño.

El uso rápido de un extintor doméstico puede sofocar un incendio pequeño antes de que se propague, pero los extintores pueden ser peligrosos en manos inexpertas. Combatir un incendio eléctrico con un extintor a base de agua, por ejemplo, podría provocarle una descarga eléctrica, y tratar de apagar un incendio grande o que se propaga rápidamente con un extintor es inútil y podría dejarlo atrapado en un edificio en llamas.

Un incendio de grasa en una cocina puede ser especialmente peligroso. Si lo detecta temprano, es posible que pueda apagarlo. Pero si un incendio de grasa se sale de control, fácilmente puede incendiar una cocina en tres minutos y medio, dejando poco tiempo para escapar.

Así que, evita este problema y adquiere un extinguidor.